Tarado
Serie que se convirtió en un incisivo autoanálisis,
un encuentro con mis culpas y con la razón de mis taras.
Son autorretratos que te sugieren mis miedos a la distancia
y te susurran mis secretos en la cercanía.
MIEDO AL RIDÍCULO
yo, minúsculo, paralizado…
ellas gráciles y veloces,
difusas sombras coloridas
como recuerdos lejanos del último segundo
yo torpe… pienso derecha, mi cuerpo dice atrás
estallan CARCAJADAS
tan gozadas como si fuera la última
tan pesadas que me aplastan sobre el concreto.


MIEDO AL CASTIGO
yo, minúsculo, paralizado…
sus gritos revientan en mis tímpanos
su mirada me estampa en el sillón
me ahogo…, me hundo…
quiero desaparecer,
y eso solo me hace más consciente
hice mal, hice mal, hice mal,
mal, mal, mal, MAL.


MIEDO AL ABANDONO
yo, minúsculo, paralizado…
ella, joven ágil y con prisa
primero desaparece su imagen
luego, en cascada se van
la sensación de su mano contra la mía
el sonido de sus pasos
el olor de su cabello,
la LUZ.


MIEDO A LAS ALTURAS
yo, minúsculo, paralizado…
sus brazos fuertes me soportan
sus dedos seguros me aprietan
lo último que siento es el viento contra mi cara
todo desaparece, el piso se aleja
muñecos aterrorizados vuelan a mi alrededor…